Cruz Roja Elda desarrolla un programa de acogida e integración destinado a personas solicitantes de protección internacional, un proyecto que cuenta con el apoyo del Ministerio de Inclusión y el Fondo Social Europeo. Alejandro Pascual, responsable del servicio transversal de empleo del Programa de Acogida e Integración de Personas Solicitantes de Protección Internacional de Cruz Roja, explicaba que el objetivo es acompañar a quienes llegan hasta alcanzar su autonomía personal y laboral. «El sistema se organiza en varias fases: valoración, acogida y autonomía. Lo importante es que las personas usuarias lleguen a integrarse plenamente en la sociedad y reviertan ese esfuerzo a través del trabajo, uno de los elementos más importantes de la integración», señaló.
Pascual apuntó que el idioma y el impacto psicológico son las principales dificultades que afrontan quienes llegan a nuestro país. «Las barreras idiomáticas son el primer obstáculo. Sin el aprendizaje del idioma no podríamos hacer nada, y por eso dedicamos muchas horas a clases de español por niveles», explicó. Además, recordó que Cruz Roja trabaja también el aspecto emocional, ya que «no solo atendemos a personas venidas de fuera, sino a quienes solicitan asilo, que traen una mochila a las espaldas terrible».
El responsable del programa subrayó que cada persona cuenta con un itinerario de integración personalizado que incluye orientación laboral, formación y acompañamiento. «Muchos vienen con titulaciones universitarias que aquí no pueden convalidar. Les ayudamos a ajustar sus expectativas y a superar el duelo de tener que empezar de nuevo, adaptándose al mercado laboral español», comentó Pascual, quien insistió en que Cruz Roja «no deja a nadie sin respuesta», buscando alternativas y programas para quienes agotan su tiempo de estancia en el sistema de acogida.
Finalmente, Pascual quiso lanzar un mensaje a la sociedad para fomentar la empatía y la colaboración. «Aunque nosotros seamos el puerto de desembarque, el trabajo de integración es tarea de toda la sociedad. Unámonos todos. Elda sabe dónde estamos, somos una organización muy querida, y estamos aquí para ofrecer alternativas y tender la mano a quienes solo buscan vivir», concluyó.
